En los años 50 del pasado siglo Pedrosa y Santelices formaban un centro de actividad urbana intensa pues hay que pensar en que atravesaba el valle la linea Bilbao-León y Burgos-Cidad (que habría formado parte del Santander-Mediterraneo).
En La Vega había dos zapaterias, de ventas de reparaciones, la de Medardo y Modesta y la de Rodrigo y Ali, una tienda de ultramarinos (Andrés y Rosario junto al establecimiento de Medardo). Seguidamente en los mismo soportales una tienda de telas junto a la casa del cura.
Donde Ana y Lidia había una carnicería (Dolores y Tomás), al lado la panadería (Basilio y Odu y Demetrio como empleado). Antes de pasar la vía hacia el pueblo viejo estaba la barbería y después de pasarla, la ferretería de Epifanio y Marina. Junto a ella había bar (Nicolás) con billares y, debajo, sala de cine o baile, según el momento. Siguiendo hacia la estación estaba la caja de ahorros junto al establecimiento de Martina y Simón que era tienda y fonda (y lo bien que cocinaba Martina). Al lado la tienda de muebles y ebanistería de Vicandi En la estación había dos carnicerías (una del bromista Juan y Ana que fueron sucedidos por su hijo Miguel y la de Ester, hermana de Visi), al lado un bar y tienda que llevaron primeramente Eladia con su hermano y después con su marido Juli) y seguidamente, donde ha estado el bar de Macu, estaba el bar-tienda de su madre Visi y su padre y cartero Manolo, seguidamente la otra carnicería de Eusebio. Más allá, hacia Porres, en lo que se llamaba El Patio Andaluz estaba la peluquería de Aude, acabándose el pueblo con la serrería de Rufino y el truchero. Volviendo por la carretera de abajo nos encontrábamos con la carpintería de Tomás y Julián. Isabelín, la mujer de Rafa, era modista y confeccionaba ropa además de tener taller de costura para las chicas del pueblo.
Girando en el cuartel de la Guardia Civil (ahora panadería de Lucy) hacia Santelices por la carretera lo primero que encontrabas era la serrería de Isaac (luego asociado con Arteaga) luego el bar-tienda de Venancio (que fué alcalde muchos años y también diputado en Burgos y que vendía huevos, incluso enviándolos a Bilbao ), pasando la Pontoncilla había una herrería (primero Angel y Cenci y luego Angel Mari).
Al otro lado de la carretera la tienda de lanas de Sita que compartía con la de electrodomésticos de su marido Antonio Mozuelos, hija de Tasio y Trudia que tenían al lado la tiendita de sus barquillos y golosinas. La misma familia tenia seguidamente una tienda de alimentación con joyería y bazar-juguetería. La carnicería de Enrique estaba al lado así como el taller de costura de Castora. En la esquina estaba la fonda de Aurea y Cirilo (después de Felix y Saúl). En la siguiente esquina estaba la tienda (de todo) de Cirilo, padre de Felix.
Subiendo hacia la Bodega había un taller de fabricación de carros, una mercería-ultramarinos y tienda de telas ( Remedios Varona y Quico Ruiz) y la misma Bodega, entonces Bodegas Entrena, que embotellaba y enviaba por ferrocarril con toda facilidad hacia Burgos, empleando a cerca de 60 personas . A la derecha , enfrente de la salida hacia Villarcayo había bar-peluquería (Begoña y Pili) y al lado laa zapatería de Eulogio, de venta y reparación.
Había dos molinos harineros, uno en Pedrosa y otro en Santelices y ambos vendían varias cosas.
Me dicen también que en todas las estaciones había una tienda.
Al otro lado de la carretera la tienda de lanas de Sita que compartía con la de electrodomésticos de su marido Antonio Mozuelos, hija de Tasio y Trudia que tenían al lado la tiendita de sus barquillos y golosinas. La misma familia tenia seguidamente una tienda de alimentación con joyería y bazar-juguetería. La carnicería de Enrique estaba al lado así como el taller de costura de Castora. En la esquina estaba la fonda de Aurea y Cirilo (después de Felix y Saúl). En la siguiente esquina estaba la tienda (de todo) de Cirilo, padre de Felix.
Subiendo hacia la Bodega había un taller de fabricación de carros, una mercería-ultramarinos y tienda de telas ( Remedios Varona y Quico Ruiz) y la misma Bodega, entonces Bodegas Entrena, que embotellaba y enviaba por ferrocarril con toda facilidad hacia Burgos, empleando a cerca de 60 personas . A la derecha , enfrente de la salida hacia Villarcayo había bar-peluquería (Begoña y Pili) y al lado laa zapatería de Eulogio, de venta y reparación.
Había dos molinos harineros, uno en Pedrosa y otro en Santelices y ambos vendían varias cosas.
Me dicen también que en todas las estaciones había una tienda.
No hay comentarios:
Publicar un comentario