Esa especie de corralito es una balanza para animales que entraban por la puerta que se ve a la derecha y salían por otra que hay a la izquierda; sirve incluso para vacas y caballos. De ese modo, cuando alguien compraba o vendía un animal, podía saber su peso exacto para que no le engañasen.
Esta báscula la podían utilizar todos los agricultores y ganaderos aunque no estuviesen inscritos en la Hermandad Sindical que es como se llamaba y que pudo ser creada alrededor del año 1900 con la finalidad de comprar los piensos y suministros necesarios en grandes cantidades, almacenarlo en la casa (que fue hecha "a prestación personal", o sea que cada cual iba a trabajar en su construcción cuando podía) y que luego los asociados pudieran comprarlo más barato.
Les resultaba mucho más económico aunque llevaba un pequeño recargo que cubría los gastos y también daba para, a partir de que la dirigiese D. Andrés Sainz Varona (hacia 1955), celebrar una fiesta el día de S. Isidro con pinchos y galletas para todos y música para animar.
La casa constaba de una vivienda, en la que vivió la familia de Merino el guarda-agujas, un salón de juntas (que se convertía en comedor para la junta directiva el día de la fiesta), un almacén y la báscula.
Anteriormente a D. Andrés la dirigía D. Manuel el maestro. Fué secretario Jesús Pereda.
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